El cineasta Joseph Eriksson describe cómo selecciona los accesorios de cámara para sus producciones de vídeo
El director y cinematógrafo Joseph Eriksson comenzó su viaje creativo con un estilo cinematográfico más depurado y lleva mucho tiempo enfocado en la elegante estética desarrollada en la gran pantalla.
“Me esfuerzo por conseguir un look cinematográfico”, explica. “Es una palabra sobreutilizada, pero para mí solo significa hacer cine correctamente. El look clásico de Hollywood ha dejado huella en mi vida y sin duda me ha influido a largo plazo”.
La gama de imágenes que se pueden crear con el mismo cuerpo de cámara es prácticamente ilimitada. Variando su elección de dispositivos y accesorios, Joseph ha creado diversos estilos en su producción hasta la fecha.
Montaje de los accesorios de una cámara
Aparte de su preferencia por el cine, Joseph es un cineasta comercial ante todo. Esto significa que le encargan crear vídeos con una estética muy variada, como una producción reciente de estilo independiente.
“La semana pasada utilicé una funda para la FUJIFILM X–H2S y un pequeño adaptador de placa trasera para montaje en V para conseguir ganar un poco de peso”, recuerda. “Estaba haciendo muchos movimientos a mano alzada, así que quería algo de masa en la cámara. Esto ayuda a que fluya mucho mejor: toda la configuración funciona muy bien en movimiento. Aunque utilizo IBIS, tener ese peso sigue siendo útil con el movimiento”.
En otro trabajo, Joseph optó por un equipo reducido. “Estaba utilizando la FUJIFILM GFX100 II en un proyecto más híbrido, haciendo fotografías y grabando películas. Para ello, la desmonté, utilizando únicamente un monitor de cinco pulgadas y un filtro ND en la parte delantera. Esto me permitió alternar entre crear fotos y grabar vídeos rápidamente. Fue fácil y sin complicaciones, y el resultado final fue brillante”.
Este sistema minimalista contrasta enormemente con la forma en que Joseph configuró la misma cámara para una estética cinematográfica más clásica en un proyecto reciente de Fujifilm.
“Cuando hicimos The Blank, usamos lentes anamórficas, que son enormes y pesan mucho, así que necesitábamos una funda grande para sostenerlo todo. Hay muchas opciones para los puntos de montaje y las fundas con la GFX100 II, y terminamos con un equipo que funcionó muy bien para ese tipo de producción”.
Conexión a accesorios
Creadas teniendo en cuenta las necesidades de los cineastas, las cámaras como la X-H2S y la GFX100 II incluyen conexiones HDMI de tamaño completo, lo que permite un fácil uso de monitores externos, algo imprescindible, a ojos de Joseph.
“Aunque la GFX100 II tiene una pantalla grande, siempre quiero que sea más grande. No me gusta usar ninguna ayuda para el enfoque; quiero avanzar y retroceder hasta encontrar el punto óptimo. Así que si lo veo bien en un monitor grande, sé que se verá bien en la posproducción. Confío en mis propios ojos”.
“Facilitar la conexión a estos accesorios esenciales es una enorme mejora de la calidad de vida”, explica Joseph. “Es muy agradable tenerlo porque siempre hay un cable HDMI adicional, es fácil de poner en práctica. En la realización de cine, siempre terminamos resolviendo problemas, por lo que tener un equipo accesible ayuda.
“Recuerdo la época de los micro-HDMI. Si se rompían estos cables mientras viajabas, tenías un problema grave. Intento planificar mucho y traer todo yo mismo, con algunos artículos extra de todo lo que puede romperse, pero es bueno tener opciones más fáciles”.
Otro elemento común en el kit de herramientas del cineasta moderno es el cardán. A pesar de las dudas iniciales que Joseph tenía acerca de este equipo, ahora es un pilar esencial en su bolsa de equipo.
“Durante mucho tiempo, no me gustaron los cardanes. Pensé que parecían demasiado artificiales y robóticos. Pero he empezado a utilizarlos en escenas que he preparado o en las que he desarrollado un guion gráfico para verlas de esa manera. Siempre que utilizo un cardán, es bastante estricto, como si estuviera haciendo esta escena por este motivo. En esos casos específicos, funciona de forma brillante.
“En mi experiencia, los cardanes funcionan bien con los cuerpos FUJIFILM. Solo tienes que deslizar la cámara y se equilibra muy rápido. Luego uso el autoenfoque en las lentes XF y GF, así que no necesito añadir al equipo motores de enfoque ni nada por el estilo”.
Selección de un look
Aunque todos los accesorios de la cámara aportan algo, el elemento principal que afecta a la estética de las imágenes es la elección del objetivo. “Los objetivos crean un look”, comenta Joseph.
“El efecto del objetivo es algo que realmente no se puede cambiar o manipular en la publicación. Es algo que surge de las decisiones que toma durante la producción”.
Las cámaras del sistema GFX permiten el uso de objetivos de cine de otras marcas. Mediante el uso de un adaptador de montaje PL, Joseph ha conocido la gama.
“He utilizado objetivos de cine anamórficos y he utilizado ampliamente el cristal GF nativo. También he probado un conjunto de objetivos vintage con mucho carácter que funcionan a la perfección junto con la cámara. Viñetean bastante cuando grabo en modo GF, pero puedo recortar un poco para eliminarlas o simplemente usar el ajuste de fotograma completo.
“Se pueden conseguir looks cinematográficos extremadamente únicos con esta pequeña cámara, si se tiene el cristal adecuado. Me entusiasma intentar alquilar otros objetivos vintage y usarlos en el sensor del sistema GFX. Estos looks habrían sido superinaccesibles antes”.
La capacidad de crear looks cinematográficos no se limita a las cámaras del sistema GFX. Recientemente, Joseph combinó la X-H2S con los objetivos de cine FUJINON MKX 18-55 mm T2.9 y MKX 50-135 mm T2.9.
“Me encantan los objetivos MKX; creo que son brillantes. Tener objetivos parafocales es muy agradable. Y el rango de distancia focal (tengo ambos: 18-55 mm y 50-135 mm) es todo lo que necesitas. Son ligeros, tienen un buen aspecto y son fáciles de usar.
“Como la X-H2S tiene un sensor más pequeño, los objetivos son más pequeños, más ligeras y más fáciles de transportar. Puedo llevar todo lo que necesito en un estuche de vuelo, además de muchos objetivos XF, por sus capacidades de autoenfoque en un cardán.
“Para un trabajo reciente, creo que tenía seis objetivos en total: dos zooms MKX, luego los FUJINON XF 8 mm F3.5 R WR, XF 18 mm F1.4 R LM WR, XF 23 mm F1.4 R LM WR y XF 33 mm F1.4 R LM WR. Ese es un conjunto completo de ópticas, y no ocupaban mucho espacio ni peso en absoluto.
“Es muy agradable no tener que limitarte a ti mismo. Esa producción tuvo lugar en Malmö, así que tuve que viajar en tren. Estaba viajando solo y no quería ir con mucho equipaje, pero no tuve que limitar mi selección de objetivos porque son todos pequeños, ligeros y son geniales”.
Sin una buena selección de objetivos con los que trabajar, dice Joseph, el trabajo de un cinematógrafo se hace mucho más difícil.
“Puedes cambiar mucho tu contenido intentando que parezca más analógico o utilizando filtros, pero la calidad y el carácter del objetivo es algo que tienes que hacer bien”, concluye. “Por eso es tan importante colocar tu objetivo favorito en el sensor de la cámara”.
